Querida mamá:
Quizá mi memoria no sea tan buena para recordarlo, pero mi corazón lo siente y sabe que tus manos estuvieron ahí en mis primeros pasos, como guía, como apoyo, como la seguridad que requería para avanzar sin temor, y así, como en aquel entonces, a pesar de que mis piernas han crecido y mis pasos ahora son firmes, tus manos me siguen sujetando.
Quizá mi memoria no lo recuerde tanto, pero sé que las primeras palabras que salieron de mi boca fueron de tu enseñanza, porque me compartías tú inteligencia, entonces tal vez sólo hacía sonidos sin sentido pero que para ti mucho significaban. Ahora que las palabras son parte de mi vida diaria, no habría las suficientes como para poder agradecerte todo lo que aprendí de tu sabiduría basta.
Quizá mi memoria no recuerde el momento exacto, pero sé que tu mirada no ha cambiado, me sigues observando como en aquellos tiempos cuando a la escuela me llevabas de la mano, tu mirada es la misma que aquella con la que me viste en la sala de parto justo en el instante en que me llevaban a tus brazos, quizá tus ojos se han nublado pero tú me miras con la misma ternura como si los años jamás hubieran pasado.
Y quizá, quizá mi memoria no pueda recordar tanto, pero sé que eres única y especial, sé que en cada una de tus canas hay uno que otro enfado, pero sé también que es la carga de aquellos y estos años que a mi lado siempre has estado, porque tus manos aún me siguen guiando, porque tus palabras me siguen enseñando, porque tu mirada me sigue amando, y porque yo, soy lo que soy gracias a ti y a todos tus cuidados.
Te quiero mucho mamá.
Comentarios
Muy bueno *.*
saludos
Precioso, el mejor de los regalos...el reconocimiento.
Besitos y felicitaciones!
mejor inspiración no puede haber...
saludos!
Simplemente HERMOSO...
Besos.
besos toño
Un abrazo niño.
Y coincido, mi mamá seguramente esté haciendo lo propio desde donde sea que esté.
Abrazo!