Circus. (fin)

 ¡Y ahora, con ustedes, el acto estelar, Niko y Kani!…

Ambos salieron relucientes. El maquillaje de Kani cubría las manchas que las lágrimas habían dejado en su rostro, su impecable sonrisa contrastaba con el amargo nudo que sentía en el corazón; en el otro extremo Niko lucía sereno, con la fortaleza acostumbrada en el dominio de su monociclo, nadie podía imaginar la debilidad que sentía en su alma despedazada.

Maya observaba tras telones el desempeño de la pareja estelar, esperando el error, la falta de complicidad entre ellos dos, esperando maliciosamente el caótico final del acto estelar, entonces sucedió, Niko levantó con sus fuertes brazos el delicado cuerpo de Kani en una acrobacia que requería el talento de los dos:

Él, controlaba el monociclo, sus brazos se extendía hacia arriba, y ahí, se apoyaba Kani con la palma de sus manos y el cuerpo completamente en posición vertical con la punta de los pies hacía las luces del escenario, era un acto de total equilibrio y confianza; fue un parpadeo, Kani tembló y perdió el equilibrio, pero en una demostración de fortaleza Niko la sujetó fuertemente entre sus brazos evitando que cayera, increíblemente no perdió el control del monociclo; la abrazó con fuerza, la miró a los ojos y le dijo: -“Jamás podría hacerte daño, eres la luz más fuerte de mi vida”- le sonrió y en un instante volvió a elevarla sobre sus brazos para finalizar el acto, los reflectores iluminaban la pista de 360°, el público enloqueció con esa demostración y los llenó de aplausos, el acto fue un éxito total.

Maya se estremeció de coraje y se escabulló entre las sombras, la función había terminado por esa noche, en medio de los aplausos agradecían sonrientes al público, ahora sus manos estaban fuertemente unidas.

Aún quedaba mucho que contar, aún quedaba un largo camino, duro y difícil, como la vida misma en el circo, ensayo tras ensayo, innovando, mejorando, sin embargo la primera prueba se había logrado, y aquella noche el equilibrio, el amor y la confianza, hicieron el mejor acto.

Aquí los relatos anteriores: Circus y Circus II

Gracias nuevamente al talento de Kanija-Kanika quién dibujó todas las ilustraciones.